Si la consulta al/a psicólogo/a es por un aspecto concreto de tu vida o por un problema puntual, la consulta puede reducirse a una o dos sesiones. Ejemplos de este tipo de consulta serían, primera crisis de ansiedad, problema laboral concreto, consejo sobre cómo explicar a los hijos el divorcio de los padres, etc.
Si tu consulta es más amplia, o deseas realizar una terapia para solucionar un problema que afecta a varias áreas de tu vida, la duración del tratamiento dependerá de parámetros diversos como son la Frecuencia o la Intensidad del Problema y ciertas características de Personalidad del Cliente.
El cliente, una vez asesorado por el/la psicólogo/a, es el que decide cuánto dura el proceso de terapia y que tipo de tratamiento desea seguir.